Han pasado casi 10 años de conflicto social en Andahuasi y lo que se ha podido ver es la destrucción y el pillaje al que ha sido sometido la otrora emblemática empresa azucarera de la provincia de Huaura, la venta de acciones a grupos privados fue utilizada para incendiar la pradera y esta solo ha servido para hacer millonarios a un grupúsculo de oscuros personajillos, fue escenario perfecto para que un ex chofer pendenciero y ladino como Wilder Ruiz se erigiera como “luchador social” y desde esa posición lograra llegar al Congreso, hoy gracias a esa “jugada” el único beneficiado debe haber sido él y sus allegados, los andahuasinos abandonados a merced de seudo dirigentes mentirosos y vivarachos aprovecharan para dilapidar fortunas so pretexto de “la defensa de Andahuasi”, estos dirigentuchos se coludieron con abogados a los que pagaron millonarias sumas de dinero a abogados que obtuvieron cero resultados, según chismes de los mismos andahuasinos la jugada era elevar el monto a “los bogas”, de ahí chapaban su “ala”, una gran cantidad de dinero que en su vida con trabajo honesto pudieron obtener, sostiene un extrabajador que por obvios motivos pide mantener su identidad en reserva.
Hoy en la coyuntura del descalabro económico de la empresa gerenciada por el cuestionado abogado trujillano Greco Quiroz , que una vez más regresó pero solo para cobrar millonarias cifras por su “labor”, pagándose por angas y mangas como ya se ha denunciado en diversos medios de comunicación y esa misma denuncia obra en manos del poder judicial , ahora lo vemos junto a Wilder Ruiz en una típica alianza contranatura que busca dizque golpear a los grupos económicos que quieren quedarse con la azucarera, eterno discurso monserga utilizado para agarrar de idiotas a los pobres trabajadores que vienen sufriendo desde hace años , con sueldos de hambre, muchos impagos, sin beneficios sociales y una serie de carencias típicas de un país africano.
Al final los únicos que se van con los bolsillos llenos son Greco y Wilder y bajo el modus operandi de acusar al grupo Wong y Bustamante de ladrones y pagando operadores mediáticos que fungen de “guau, guau”, para que se repita este discurso que solo hace que ellos se metan al bolsillo tremendo dineral, estos seudo personajes han vivido cerca de una década a costa de los pobres trabajadores andahuasinos a los que manejan como borregos.
Por curiosidad observamos el lado que Santa Rosa y Quipico que adminsitra el grupo Wong , nada más para contrastar la información y nos dimos con la sorpresa que ahí están los trabajadores felices, al día en sus pagos, disfrutando campeonatos, compartiendo gratos momentos con sus hijos y familias, con escuelas y postas médicas. Y eso me recordó lo que vivio Alemania luego de ser dividida con un gran muro tras perder la segunda guerra mundial. Alemania oriental era un lugar horrible, sin acceso a la prosperidad menos a la modernidad, donde su población era brutalmente reprimida si quería salir de ahí, mientras Alemania occidental era furor, libertad, una boyante economía, un lugar donde la esperanza de ser cada día mejor era la meta de sus habitantes. A ese grado de comparación hemos llegado en Andahuasi .
Dice un viejo dicho que por mi mejoría mi casa dejaría, el trabajador andahuasino debería evaluar con frio pragmatismo si quiere seguir siendo utilizado por seudo dirigentes con ganas de robar y que personajes como Greco y Wilder sigan siendo más ricos a costa de utilizarlos como carne de cañón, o irse al otro lado, donde hay un estado de bienestar para ellos y sus familias y una esperanza de crecimiento social. Que el discurso desfasado y retrogrado y las cancioncitas velasquistas nunca han podido darle bienestar a las familias, eso en pleno siglo XXI ya casi todos lo sabemos hermanos de Andahuasi.
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