Decidí incursionar en política y tratar de llegar a los electores del distrito de Santa María, tierra bendita que me vio nacer y crecer, con el único afán de ponerme a su servicio y tratar de solucionar; con un buen equipo técnico para realizar una buena gestión municipal; los problemas que por años aquejan a la población campiñera.
Sin embargo, a pesar de venir planteando una campaña política diferente, con propuestas y acciones concretas, siempre de la mano con los vecinos de buena voluntad, que como yo, están cansados de tanto descuido y escasa capacidad de gestión de quienes recibieron el encargo del pueblo para gobernar, vengo recibiendo insultos, amenazas y comentarios denigrantes, propios de gente de malísima reputación.
Lo peor, gente que se escuda en el anonimato, que no expresa más que cobardía y bajeza, por cuanto, les resulta imposible destacar un mérito o logro de su candidato favorito, lo cual, es su derecho y muy respetable por cierto.
Ante esta situación, muy deplorable por cierto, quiero expresarle a mis vecinos campiñeros, que estamos más fuertes y decididos que nunca, a derrotar a quienes por años, han traficado con la necesidad de nuestro pueblo y quieren seguir haciéndolo.
Mi equipo y yo, seguiremos trabajando arduamente, para ofrecerle a Santa María, la mejor opción de gobierno municipal.
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