Mediante un comunicado difundido ayer, la Santa Sede anunció el nombramiento como comisario apostólico al obispo colombiano Noel Antonio Londoño Buitrago, quien estará a cargo de la intervención de la organización religiosa fundada en 1971 por Figari. Londoño, de 68 años, actualmente es obispo de Jericó, Antioquía, Colombia.
Esta decisión ocurre después de que en diciembre último la Fiscalía pidiera prisión preventiva para Figari y otros tres exmiembros del Sodalicio por los delitos de asociación ilícita para delinquir y lesiones psicológicas graves.
“El santo padre Francisco ha seguido con preocupación todas las informaciones que, desde hace varios años, han ido llegando a la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica sobre la situación del Sodalicio de Vida Cristiana”, indica la nota.
El papa, añade, se ha mostrado especialmente atento a la notable gravedad de las informaciones acerca del régimen interno, la formación y la gestión económica-financiera, motivo por el cual ha pedido con insistencia al Dicasterio una particular atención.
“Después de un profundo análisis de toda la documentación, el Dicasterio [Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica] ha promulgado el Decreto de Comisariamento [intervención]”, concluye el comunicado de la Santa Sede.
Por otra parte, se informó que el cardenal Joseph William Tobin, quien había sido nombrado delegado ante este movimiento para realizar la investigación, “continuará siendo referente de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica en cuanto Delegado ad nutum en relación con Sodalitium Christianae Vitae, particularmente para las cuestiones de índole económica”.
Colaborarán con intervención
El Sodalicio de Vida Cristiana se comprometió a colaborar con monseñor Noel Antonio Londoño Buitrago, en la labor de interventor que le ha encomendado el Vaticano. Mediante un comunicado, el Sodalicio precisa que monseñor Londoño podrá intervenir directamente en el gobierno, así como también en las cuestiones económicas y en los demás asuntos de la sociedad religiosa. Agradece al papa Francisco y a la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica por seguir con preocupación la vida del Sodalicio.
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