UN DÍA COMO HOY SE REALIZO EL HISTÓRICO FESTIVAL DE WOODSTOCK


Uno de los más grandes hitos de la historia del rock comenzó en un día como hoy pero en 1969. El pueblo de Sullivan, Nueva York, dio acogida -a regaña dientes- a el más recordado festival de todos los tiempos. Entre el 15 y el 18 de agosto unas 500 mil personas celebraron el rock y el amor libre.

La gente del pueblo nunca quiso recibir a medio millón de hippies en su pueblo, pero Max Yagur, dueño de la granja Bethel, en Sullivan County, aceptó alojar el festival en esa chacra de varias hectáreas. A pesar de ser judío practicante y para nada fanático del rock, Yagur pensaba que había una brecha generacional que debía cerrarse, y consideró que su aporte de permitir el festival iba a ayudar a eso. “Si la distancia generacional se tiene que cerrar, nosotros los viejos tenemos que hacer más de lo que hemos hecho”, afirmó alguna vez en una entrevista.

Según los números oficiales, 400.500 personas fueron convocadas al evento, pero más de 500.000 afirman haber asistido. Ambos números están por encima de los 60.000 que los organizadores estaban preparados para recibir. Se estima que, además, unas 250.000 personas no lograron llegar a tiempo o asistir a los conciertos por limitantes de espacio.

Un gran segmento de la población estadounidense estaba hastiada de las guerras, del gasto militar y de la constante presión del gobierno y los medios por apoyar y enlistarse en el ejército. Hacía un par de años que Mohamed Ali había rechazado hacer el servicio militar y enfrentaba un juicio por ello, un mensaje de paz que muchos secundaron, y el llamamiento a la convivencia y el denominado “amor libre” de esos años alcanzó su cenit en Woodstock ’69.

Los hippies estaban en contra de cualquier levantamiento bélico, y es por eso que Jimi Hendrix tocó el himno estadounidense con su guitarra eléctrica fuertemente distorsionada, como protesta a los comportamientos armamentistas del Gobierno norteamericano.
El pacificismo, el amor libre, la vida en comunas cooperativas, el ecologismo y el arte eran las premisas de estas tribus urbanas que aún siguen existiendo bajo el concepto de las “ecoaldeas”.

En un principio, el evento estaba pensado para darse “un gusto personal” por parte de los organizadores, porque consideraron que iban a tener pérdidas. A pesar de las bajas expectativas, ese medio millón de personas hizo que el evento resultada rentable. Los números verdes se contrastaron con la pérdida de 4 vidas y residuos sanitarios por todo el lugar, algo que le costó a la organización varios miles de dólares para resolver.

El astronómico cartel de artistas

Varios nombres saltan la superficie cuando del Woodstock ’69 se habla; The Who, Jimi Hendrix o Joe Cocker son algunos de ellos. Lo cierto es que casi una treintena de artistas pasaron por el mítico escenario. Juan Baez, Richie Havens, Canned Heat, Creedence Clearwater, Greatful Dead, Janis Joplin, Santana y muchos otros se unieron a ese canto rebelde de tres días.
Algunos otros grandes del rock rechazaron estar en la historia de este festival. The Beatles, que tenían tres años sin tocar y estaban a punto de separarse, decidieron declinar la invitación pues los organizadores hablaron con John Lennon que dijo que para que ellos pudieran aceptar tocar, deberían agregar al cartel a la banda de Yoko Ono, “Plastic Ono Band”, cosa que rechazaron los productores del evento y esto evitó el cierre del contrato.

The Doors también rechazó ser parte del line up, Ray Manzarek (tecladista de la banda) consideró que el festival iba a ser un “festival de segunda categoría”. Eso sin contar con que Jim Morrison estaba en medio de un proceso judicial.