Tal parece que el flamante ministro de Cultura Jorge Nieto y el reciente contralor Edgar Alarcón se van a encontrar con cosas muy interesantes en dicha cartera después del 28 de julio.
Ambos hallarían que: 1) Varios anteriores directores generales se habrían quedado después como “asesores” con sueldos más altos. 2) Una funcionaria fue a su vez apoderada de una ONG. 3) Se mantuvo irregularmente el presupuesto del Indepa cuando ya la Dirección de Pueblos en Situación de Aislamiento realiza sus funciones. 4) Habría que revisar varias asesorías que se habrían creado para gente que no cumplía los requisitos para ser contratada.
Ya la Contraloría ha cuestionado varias contrataciones por no cumplirse con los títulos, capacitaciones y términos de referencia, por lo que se ha ordenado “auditorías de cumplimiento”. 5) Se paga en exceso: S/22 mil mensuales en la Dirección de Derechos de los Pueblos Indígenas y S/10 mil en la inútil dirección de “diversidad cultural”. 6) Que varios funcionarios habrían tenido aumentos desproporcionados de hasta S/10 mil para llegar a esos mismos S/22 mil (y para pasar del ingreso máximo de S/15,600 tienes que estar en el muy difícil PAC). 7) Que 17 funcionarios afortunados ganan entre S/22 mil y S/12 mil. 8) Se les pagaría S/8 mil en la Dirección de Contacto Inicial a abogados que no se necesitan allí y sin mayor experiencia laboral de relevancia. 9) Habrían pasado a responsables de direcciones sin máster a asesorías, lo que posibilita subir el sueldo obviando ese requisito. O que con el mismo perfil que trabajaban en otra área han rotado algunos al puesto de asesor para que ganen más de S/10 mil.
Y sería interesante que Nieto también averigüe quiénes efectivamente mandaban allí.
Y sería interesante que Nieto también averigüe quiénes efectivamente mandaban allí.