El gobierno de Ollanta Humala buscará desatar el caos en la marcha del 5 de abril para forzar la figura de la postergación de las elecciones, con el pretexto de que el ambiente electoral no presta las condiciones para la realización de la contienda electoral del 10 de abril.
Lo advirtió el parlamentario Javier Bedoya, al señalar que ha recibido esta información a través de distintos medios, y que vincula a Palacio de Gobierno en un complot contra la democracia.
“Se reiteró la alerta en el sentido que con motivo de la protesta que estaban organizando los grupos antifujimoristas para el 5 de abril, se estarían introduciendo gente vinculada a Sendero Luminoso, que esto estaría apañado, sino profijado por el gobierno, por un sector de este”, indicó el legislador del Partido Popular Cristiano (PPC).
Bedoya de Vivanco indicó que el mensaje que ha recibido, y también en otras tiendas políticas, es que se busca alcanzar un alto grado de “perturbación nacional, que justificaría un dejar sin efecto las elecciones o una intervención militar”.
“Según estas mismas versiones enterado de esta situación el premier (Pedro) Cateriano se habría opuesto tajantemente a una perspectiva de estas y no acompañaría”, puntualizó sobre las diferencias que existirían sobre un plan que ya se fraguaría al frente de la Plaza de Armas de Lima.
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