Hijo asesina a su madre lanzandola desde el 4to piso


Un hecho terrible conmocionó a los trujillanos. Un hijo asesinó a su madre arrojándola, a través de un tragaluz, desde el cuarto piso del edificio en el que vivían.

La progenitora, Martha Benavides de la Zota (60), murió en el acto. La fiscal de turno ordenó el levantamiento del cadáver y su internamiento en la morgue para la necropsia de ley.

Los hechos ocurrieron a las 11 y 30 de la noche del viernes en la cuadra 2 de la calle Marcelo Corne en la urbanización San Andrés, a unas cuadras del centro histórico de Trujillo.

Según informaciones, el presunto parricida Elke Frances Hermosa Benavides, de unos 30 años de edad, habría tenido una fuerte discusión con la persona que lo trajo al mundo en el departamento que ambos habitaban. Ella le habría pedido dejar los vicios del alcohol.

Fuera de sí, el hijo rompió el vidrio de una ventana, que da a un tragaluz, y a través de ella lanzaba sillas, ropa y otros objetos. Cegado por el descontrol, habría tomado a su madre y la arrojó al vacío, pese a que ella le imploró que no lo hiciera. Incluso en ese instante, un vecino le pidió, en vano, a Elke que no hiciera daño a la sexagenaria.

La mujer cayó al piso y falleció de manera instantánea, ya que sufrió golpes en la cabeza y en las piernas.

Los vecinos del edificio, que terminaban de ver el partido de fútbol Perú vs Paraguay, quedaron conmocionados.

Enseguida, llegó al lugar una hija de Martha. Como era comprensible, rompió en llanto por la muerte de su ser más querido.

Asimismo, la Policía Nacional llegó al departamento e ingresó a la fuerza al baño donde se había encerrado el sujeto, quien luego tuvo que ser trasladado por los bomberos al Hospital Regional de Trujillo porque tenía herida una de sus muñecas. El vástago, quien sufriría de alteraciones mentales, quedó detenido.

Ahora los efectivos de Criminalística de la Policía iniciaron las investigaciones tomando huellas en el lugar. Buscan conocer con exactitud el móvil de este crimen.

No es la primera vez que ocurre un hecho así en Trujillo. En abril del año pasado, un canillita, Ever Ruitón, asesinó a su padre, Manuel Ruitón, asestándole una cuchillada en la espalda cuando ambos celebraban el cumpleaños de la madre del fallecido, en Huanchaco.

El presunto asesino, en estado de ebriedad, le había reclamado a su progenitor por haberlo abandonado, al igual que a su madre, para irse a vivir con otra mujer, según narraron testigos a la PNP en aquel entonces.

La coordinadora del Centro de Emergencia Mujer (CEM) de Trujillo, Isabel Botton Panta, declaró sobre la violencia de manera general.

Aconsejó que cuando las relaciones interpersonales se agudizan, los involucrados deberían acudir a los cinco centros de salud mental del Ministerio de Salud que hay en la provincia de Trujillo para recibir ayuda profesional adecuada.

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