Es harto conocido el enfrentamiento entre Lita Román y Javier Alvarado, pero nadie imaginaba este “gesto”, algo desproporcionado, para los que conocemos el mutuo enfrentamiento entre ambas autoridades.
En las entrevistas difundidas en Canal N y ATV, la vicepresidenta dejo en claro las amenazas de muerte para con su persona, y los medios nacionales compararon al presidente Javier Alvarado con el presidente de Ancash , Cesar Álvarez , acusado de múltiples actos de corrupción y de ser el autor intelectual de la muerte de un ex consejero regional.
Ante esto la estrategia seria limpiar el honor manchado de la gestión, entretanto Lita Román dijo que asistirá a amadrinar la obra siempre y cuando se le hagan llegar los documentos que serán revisados por sus peritos y no encuentre actos dolosos dentro de la ejecución de la obra.
Una hipótesis seria invitarla para luego desbarrancar el vehículo donde se transporta la vicepresidenta, de esta manera Javier Alvarado podría postular tranquilamente a la reelección, con Lita Román muerta.
Sin embargo en las ultimas horas trascendió que la vicepresidenta no amadrinaría la obra de Cancaya ni tampoco asistiría, ya que habría hecho un análisis concienzudo del tema, habiendo llegado a la conclusión de que esta invitación es una estratagema para tratar de burlarse públicamente de ella y las denuncias hechas, en las próximas horas se emitirá un comunicado al respecto donde se indicaran los pormenores de esta situación.
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