HILDEBRANDT: “KEIKO ES MÁS ASTUTA Y FRÍA QUE ALBERTO FUJIMORI, LO CUAL LA HACE MÁS PELIGROSA”

Periodista enfatizó que Keiko Fujimori es quien gobierna el país: “Echa ministros; se tumbó a un presidente”.

El periodista César Hildebrandt señaló que la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, es quien gobierna el país y decide las cosas más importantes del Perú, poniendo como ejemplo la caída de ministros y de un mandatario.

“[Keiko] gobierna el país, decide las cosas más importantes del Perú, echa ministros, se tumba un presidente. A Keiko no le va mal, le va rebien. Las encuestas no le hacen cosquillas a la gente, a Keiko no le importa eso hoy, en absoluto”, analizó en diálogo con Ideeleradio.

En otro momento, Hildebrandt comentó que la excandidata presidencial hace muestra de una mayor astucia y frialdad en comparación al líder histórico del fujimorismo, Alberto Fujimori, carácter que —según considera— lo ha llevado a desplazar a Kenji, el preferido de su padre.

“Keiko es la sucursal filial muy ampliada del papá. Es la mayor franquicia de Alberto Fujimori, y tiene todo lo que tuvo Alberto, y le suma una serie de otras cosas, es mucho más astuta, más fría, más impaciente, mucho más apasionada, lo cual la hace aún más peligrosa. […] La construcción mayor de Alberto es Keiko; el busto de Alberto es Keiko. Al final se ha quedado. Él hubiera querido un papel para el hijo benjamín, el hijo favorito, pero no ha podido”, comentó.

Para el periodista, este poder demostrado por Keiko ha obligado a Alberto Fujimori a aceptar su liderazgo por encima de Kenji y a no hacer cuestión de estado con la expulsión y la humillación que sufrió el menor de sus hijos a manos de Fuerza Popular.

“Keiko ha estado a punto de ganar. Nadie podía imaginar que, desde los escombros del fujimorismo del año 2000, podía la hija perder con las justas dos veces la Presidencia. [Kenji Fujimori] intentó hacer algo distinto, auténticamente blando y light, y claro no cabía en una organización hecha para el totalitarismo, hecha para el control absoluto del poder”, apuntó.

“Kenji era una incomodidad, porque además pretendía ser la herencia del padre, y Keiko no podía tolerar esa usurpación, porque es ella, y Alberto lo ha entendido al final, por eso es que no ha hecho cuestión de estado con la expulsión del hijo y la humillación del hijo, ha aceptado resignadamente que quien manda es aquella que él creo”, agregó.

Recordó que el fujimorismo es un movimiento que se reconstruyó en poco tiempo y entró nuevamente a participar en las elecciones, al punto que hoy manejan el Parlamento y gobiernan. En ese sentido, cuestionó que la Izquierda política, la prensa y un sector de la sociedad civil no hayan podido reaccionar de manera contundente frente a la agenda del fujimorismo.