Al parecer, ¿Alan García sería un adivino, clarividente, quiromántico y habría —hace muchos años (2013) — previsto que el caso Odebrecht y Camargo Correa, en algún momento, estallaría? Pues García Pérez, en julio de 2013, transfirió un inmueble de 400 metros cuadrados (ubicado en el barrio de San Antonio, en Miraflores) que asciende a S/. 2.7 a su menor hijo de iniciales F.D.G.C. Los expertos calificaron que esa jugada legal se habría hecho para evitar un posible embargo ante futuros procesos legales que se podría abrir contra él por diversas actividades y obras presuntamente ilícitas en su segundo gobierno, según el diario Peru21.pe, ya que las acusaciones de su primera gestión central prescribieron.
Abogados especializados en la materia aseguran que este recurso legal de transferir un bien a su menor hijo, bajo la figura jurídica del ‘patrimonio familiar’, protegería dicha residencia de cualquier embargo futuro requerido por la justicia del país. Cabe señalar que el indicado inmueble fue adquirido en febrero de 2013, y cuatro meses después realizó la transferencia, por ese motivo, levantó muchas sospechas y la Fiscalía, en ese entonces, inició una exhaustiva investigación por enriquecimiento ilícito.
“Según el Cödigo Civil vigente, el patrimonio familiar es una figura legal creada precisamente para proteger un inmueble de cualquier embargo. Se especifica que el bien no se puede vender ni ceder legalmente, pero sí se puede embargar “el fruto de la vivienda”, es decir, el dinero que se obtenga si uno de los beneficiarios decide alquilar la casa”. Explica Peru21.pe
Asimismo, en julio de 2013 se hizo realidad este trámite, cuando se publicó el edicto en el diario oficial El Peruano. En ese entonces, había un plazo de 10 días –que vencía el 6 de agosto de 2013– para la Fiscalía presente oposición a la ejecución de este recurso legal. Pero, valgan verdades, todo indicaría que los intentos de la justicia del Perú habrían quedado en nada. Se desconoce por completo en qué quedó todo ese momentáneo escándalo.