Para el economista Justino Valencia, se ha consumado una persecución hacia su persona que se vendría dando según él, desde la campaña previa a su elección, donde sus enemigos políticos trataron de tachar su candidatura.
Justino Valencia en sus últimas horas como alcalde señalo que su vacancia es el precio de no acceder al chantaje de un grupo con intereses económicos que había puesto la mira en tomar el control del Cerro Centinela con el fin de construir ahí un embarcadero multimodal, termino bajo el cual se escondería la utilización de este embarcadero para uso de empresas mineras, razón por la cual contaminaría el medio ambiente, motivo por el cual el pueblo huaurino y su alcalde nunca estuvieron de acuerdo con dicho proyecto.
“Yo me voy, pero quien asume mi teniente alcalde Gilmar Solorzano , estamos comprometidos con el pueblo de Huaura y no vamos a ceder a ningún tipo de chantaje, ni a la corrupción, con el fin de favorecer a grandes empresas y no a la población que nos eligió”, finalizo el alcalde huaurino.