Vestido con su uniforme y portando su arma de reglamento, el agente fue reducido por sus colegas, quienes antes de intervenirlo le solicitaron que se quite el uniforme. Tras una acalorada discusión, una bomba lacrimógena fue lanzada a la masa.
Muchos manifestantes cayeron al piso, mientras la PNP aprovechó para detener al agente Siapo Moreno. En una de las imágenes se ve que el suboficial sacó su arma.
Luego de ello fue trasladado en un patrullero a una comisaría en donde fue recluido en un calabozo. Según anunció el director general de la PNP, Vicente Romero, el suboficial será dado de baja y sería recluido en un penal, dado que la falta que cometió es considerada muy grave.
Una vez mas queda comprobada que la cobardía y desunión de los policías hace imposible cualquier reclamo por hacer respetar sus propios derechos o lograr un trato laboral digno.
Comentarios